Con la famosa crisis económica mundial, donde ya es sabido que en este sistema capitalista, si yanquilandia estornuda nos resfriamos todos, queremos tocar el tema de Letonia. Ya que viven horas intensas y no se ve una solución rápida.
Desde enero, el país se encuentra al borde de la bancarrota y ha puesto a prueba la solidaridad de la Unión Europea, de la que forma parte aunque no consigue reunir las condiciones para sumarse al euro, o sea que sigue aun con su moneda propia.
De todos los países del Este europeo, Letonia es la más afectada por el colapso financiero global porque fue el país que más radicalmente se abrió al liberalismo económico. Sin industria ni grandes exportaciones, que no sea la madera, se transformó en una economía de servicios. Con especuladores financieros dispuestos a ofrecer créditos a corto plazo a una población recién independizada de la Unión Soviética y con ansias libertarias y consumistas.
Los letones cayeron en la tentación del capitalismo y consumismo, les ofrecieron hipotecas, coches, electrodomésticos, etc, con créditos a plazos. Y les daban dos opciones, comprar con un caro interés basado en la moneda letona o comprarlos a un interés imperceptible pero valuado a nivel euro. Claro, que cuando la crisis empezó a hacerse notar, la moneda letona nada pudo contra el euro, pero los letonas cobran en moneda local y deben pagar en euros. Y no solo que el país vive una desocupación de 21%, sino que su moneda no tiene poder.
Los letones no pueden pagar los créditos en euros. La ola de consumismo que generó el crédito fácil, promovido por los bancos mayoritariamente de origen sueco instalados en Letonia, se acabó junto con el aumento de desempleo al ritmo de la crisis global. Desde enero son desalojados de sus hogares, pierden sus casas de campo, sus tractores, sus automóviles y se ven en una situación desesperante.
Los letones salieron a la calle y bajaron al gobierno, pero ya sabemos como funciona esto, cae un gobierno, sube otro y todo sigue de la misma manera. O lo que es peor, que recibiran ayuda del FMI.
Desde enero, el país se encuentra al borde de la bancarrota y ha puesto a prueba la solidaridad de la Unión Europea, de la que forma parte aunque no consigue reunir las condiciones para sumarse al euro, o sea que sigue aun con su moneda propia.
De todos los países del Este europeo, Letonia es la más afectada por el colapso financiero global porque fue el país que más radicalmente se abrió al liberalismo económico. Sin industria ni grandes exportaciones, que no sea la madera, se transformó en una economía de servicios. Con especuladores financieros dispuestos a ofrecer créditos a corto plazo a una población recién independizada de la Unión Soviética y con ansias libertarias y consumistas.
Los letones cayeron en la tentación del capitalismo y consumismo, les ofrecieron hipotecas, coches, electrodomésticos, etc, con créditos a plazos. Y les daban dos opciones, comprar con un caro interés basado en la moneda letona o comprarlos a un interés imperceptible pero valuado a nivel euro. Claro, que cuando la crisis empezó a hacerse notar, la moneda letona nada pudo contra el euro, pero los letonas cobran en moneda local y deben pagar en euros. Y no solo que el país vive una desocupación de 21%, sino que su moneda no tiene poder.
Los letones no pueden pagar los créditos en euros. La ola de consumismo que generó el crédito fácil, promovido por los bancos mayoritariamente de origen sueco instalados en Letonia, se acabó junto con el aumento de desempleo al ritmo de la crisis global. Desde enero son desalojados de sus hogares, pierden sus casas de campo, sus tractores, sus automóviles y se ven en una situación desesperante.
Los letones salieron a la calle y bajaron al gobierno, pero ya sabemos como funciona esto, cae un gobierno, sube otro y todo sigue de la misma manera. O lo que es peor, que recibiran ayuda del FMI.
3 comentarios:
Esto ya lo viví. En la argentina fue el "que se vayan todos" y no se fue nadie.
yyyyyyyy...........al pueblo tambien le gusta la boludez,
Si no cambia el pueblo y sale a la calle, las politicas seguiran siendo maquillaje
y donde coño esta letonia?
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